Adaaran Select Meedhupparu es un resort de 4 estrellas situado en el atolón Raa, a 45 minutos en avioneta de la capital Male (a 135 Km). Al estar tan lejos de Male el traslado se convierte en un auténtico espectáculo. Realmente desearías que estuviera más lejos para poder contemplar las preciosas islas desde el cielo durante más tiempo. |
Recepción del hotel. Es un lugar peculiar del hotel. Los chicos de la recepción no hablaban español, pero si necesitas hacerte entender puedes hacerlo con un limitado nivel de inglés. Para los menos arriesgados: como hay muchos turistas italianos en este hotel, muchos chicos se atreven con algunas palabras en italiano porque saben que los españoles las entendemos. |
El resort cuenta con 214 habitaciones con aire acondicionado construidas en villas adosadas pareadas. La mayoría de ellas tienen vistas al jardín, pero se encuentran a escasos pasos del mar.
Las habitaciones: las habitaciones miden unos 46 m2 y están completamente equipadas. Los muebles son rústicos (y un poco antiguos...), pero si viajas con un presupuesto ajustado, sin buscar el diseño pero sí una agradable estancia, Meedhupparu es el lugar adecuado. Limpian las habitaciones dos veces al día. En general la estancia en la habitación fue bastante cómoda, teniendo en cuenta que pasamos la mayor parte del tiempo fuera disfrutando de la isla.
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En mi opinión personal lo único que quitaría de la habitación sería el cabecero verde de la cama (y pondría un cuadro o cualquier otra cosa), porque se convierte en un gran armatoste con poco "feng-shui" que acumula polvo. Debes saber también que aunque estés en régimen de Todo Incluído, el minibar de la habitación por aquel entonces no contaba con bebidas alcohólicas y solamente reponían dos botellas grandes de agua al día, por lo que si querías "reponer" tenías que ir tu mismo al bar.
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La ducha es exterior, y debo decir que es toda una sensacion ducharse al aire libre.
La única pega es que la presión del agua no era muy fuerte en todas las habitaciones, y en algunas ocasiones te ibas a duchar (normalmente en la hora punta), sólo caía un fino hilo de agua, lo cual es muy exótico pero poco práctico...
La playa: sencillamente espectacular. Me llamó especialmente la atención que las playas estuviesen tan vacías, estando el hotel lleno, teniendo en cuenta su majestuosidad. Extensas playas de arena coralina fina y aguas color esmeralda y llenas de vida rodean una isla de menos de 2 Km. que puedes pasear completamente en 30-40 minutos. |
La comida es variada, tan variada que representa a culturas que para entonces eran totalmente desconocidas para nosotros. Cada cena es temática (casi todos los hoteles de Maldivas lo hacen así), y puedes encontrar comida acorde a la noche Italiana, Maldiviana, Francesa. etc. Ofrecían la noche Española como algo excepcional en otro restaurante y había que pagar un suplemento. Nosotros no fuimos porque no esperamos comer Tapas y cerveza San Miguel fuera de España cuando estamos aquí para experimentar las delicias de otras culturas, pero como reclamo a otros turistas extranjeros tal vez pueda funcionar.
Pegas:
La única pega sobre el restaurante fue: la mesa que nos asignaron en el restaurante era para 4 personas y el tener que compartir la mesa durante todas tus vacaciones con otra pareja hizo que perdiera todo la intimidad y el encanto. No tuvimos nada en contra de la maravillosa pareja de ingleses con la que nos sentaron, pero dada nuestra capacidad idiomática hizo que nos perdiéramos también el encanto de una buena conversación con aquella divertida pareja.
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Otra de las pegas es la limitación de comida adaptada para vegetarianos. Y aunque había gran variedad de comida existían muchas limitaciones para un vegetariano: dificultad de encontrar alimentos vegetales que aportasen todos los nutrientes para un vegetariano. El último día nos preguntaron qué tal nuestra estancia y nuestra única crítica fue esta, las limitaciones para vegetarianos. Nos dijeron que lo teníamos que haber dicho al llegar y hubiesen preparado platos especiales (creo que deberían habernos preguntado al llegar si teníamos necesidades alimenticias especiales o alergias a algún alimento). Esto nos hizo aprender a movernos en el extranjero y ser esto el principal requisito: no tener miedo a preguntar. Que sirva de aviso a los que vais a alojaros en este hotel y si necesitáis algún tipo de dieta especial, avisadlo en recepción y después al chef o camarero del restaurante, para ver qué pueden hacer.
El concepto de Todo Incluido fue un gran acierto, aunque se trate de personas que no beben alcohol, porque simplemente el tener que pagar de 3 a 4 dolares por cada botella de agua (desconozco el precio de otro tipo de bebidas), al cabo de una o dos semanas, se acumula un gasto increíble. Así que disfrutamos de una cañita en la piscina o en cualquiera de los bares sin limitaciones, ni tener que estar haciendo cálculos del gasto al final del viaje.
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La piscina era simplemente fantastica, y rodeaba el bar con espectaculo nocturno.
SPA: Una de las zonas comunes que más llaman la atención de este hotel y es de paso obligado es la zona del SPA. Se trata (o al menos así se trataba cuando estuvimos) de una especie de placita de chozas comunicadas en las que ofrecen distintos masajes especializados según la zona: Ayurveda, Chino, Tailandés, etc.
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Probamos el masaje Shirodara Ayurveda (un fino reguero de aceite cayendo sobre tu frente durante más de 40 minutos que te lleva casi a un estado de éxtasis...) y un masaje de reflexología china (debo decir que sufrí, especialmente cuando me masajeó las cuencas de los ojos con las lentillas puestas. Os preguntaréis porqué tenía las lentillas puestas, y es porque inicialmente se trataba sólo de un masaje de espalda, pero la chica expandió el servicio sin avisar y la verdad es que me quedé como nueva...). Aprovechamos los descuentos que ofrecían constantemente en el hotel y la verdad es que, aún siendo un poco caros, valió la pena la experiencia.
En resumidas cuentas, tuvimos la suerte de pasar dos semanas maravillosas, además, el tiempo nos acompañó y sólo hubo un día de monzón aún siendo Julio, por lo que esta experiencia nos hizo dejar las puertas abiertas a volver a Maldivas.
* Fotos tomadas del hotel con fines únicamente promocionales.